Su dueña es Lady Maria, de incansable sonrisa y palabras llenas de tanto cariño que se hace corto cuando estamos juntas.
En tamaño pequeño, su pelaje hace pequeños corazones. Con lazote en fucsia y nombre bordado en rosa es coqueta como su dueña y además ya comparte un lugar repleto de muchos muchos más "compañeros" de fauna.
Lady Maria tiene además una profesión que conlleva infinita paciencia y delicadeza, ademas "parece tan fácil" que no me extraña que tanto los peques como nosotros los papis salgamos con una gran sonrisa: es odontopediatra!!! y mi lady esta deseando siempre ir a verla junto con Azucena, otra gran profesional.
Gracias a ambas por la sonrisa radiante que luce Gala... y yo cada vez que os veo.